Colección
Thuja
Thuja
Había llovido un poco, y un sol que calentaba el alma y la nuca, se dejaba ver entre los arbustos. Estaba rodeada de ocres y verdes, piedras bien redondas como guijarros y un monte imponente se alzaba delante de mí. Detrás, dejaba el lago y la imagen preciosa de cuando el agua cae sobre más agua. Y así, entre montañas y aguas, crece esta tuya que parece coral.